¿Qué es SaaS? Software como servicio

El software como servicio SaaS es un modelo de entrega de software basado en la nube en el que un proveedor de la nube desarrolla y mantiene el software de la aplicación en la nube, le proporciona actualizaciones automáticas y lo pone a disposición de sus clientes.

Los clientes pagan a través de Internet, cada vez que utilizan el sistema. Los proveedores de la nube pública administran todo el hardware y el software tradicionales, incluido el middleware, el software de aplicaciones y la seguridad.

De esta manera, los clientes de SaaS pueden reducir significativamente los costos, implementar, escalar y actualizar las soluciones comerciales más rápido de lo que pueden proporcionar los sistemas locales y el mantenimiento del software, y predecir con mayor precisión el costo total de propiedad.

A principios de la década de 2000, la primera generación de soluciones SaaS estaba aislada, era inflexible y estaba diseñada para resolver un solo problema comercial.

SaaS ha cambiado drásticamente desde entonces. Hoy en día, las modernas suites en la nube abarcan y conectan todo, desde finanzas, recursos humanos, adquisiciones y procesos de la cadena de suministro hasta soluciones de comercio como el marketing, ventas y servicios.

La historia del software como servicio

En la década de 1960, los ordenadores centrales se conectaban a terminales que compartían software de la unidad central, un sistema de entrega de software llamado tiempo compartido.

A medida que los costos de las computadoras comenzaron a disminuir en la década de 1980, muchas empresas crearon sus propias versiones locales de tiempo compartido, llamadas redes de área local (LAN). Sin embargo, la empresa proporciona y administra el hardware y la red.

Con la llegada de Internet en la década de 1990, los proveedores comenzaron a alojar software y a entregarlo a los clientes a través de Internet. Sin embargo, este predecesor de SaaS, conocido como modelo de proveedor de servicios de aplicaciones (ASP), tenía serias limitaciones.

Por ejemplo, cada cliente necesita su propia versión del software, lo que significa que debe estar instalado algún software en la computadora del usuario. La instalación es costosa y requiere mucho tiempo. Finalmente, las soluciones ASP a menudo no brindan una forma de recopilar y agregar datos de manera eficiente.

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Las primeras soluciones SaaS aparecieron a finales de la década de 1990, cuando se acuñó el término SaaS. Este nuevo modelo ofrece una mayor eficiencia que el modelo ASP. Gracias a su denominada arquitectura multiinquilino, una sola instancia de una aplicación puede servir a múltiples usuarios e incluso clientes. Ya no se requiere la instalación del software local. Proporciona una forma de recopilar, agregar y centralizar datos valiosos de aplicaciones.

Si bien el modelo de entrega ha permanecido igual desde principios de la década de 2000, SaaS ha evolucionado significativamente desde soluciones aisladas de primera generación hasta conjuntos de aplicaciones modernas que permiten una alta visibilidad en toda la empresa y pueden aprovecharse mediante tecnologías de integración de inteligencia artificial, como aprendizaje automático, chatbots, asistentes digitales, IoT, blockchain, realidad aumentada y realidad virtual.

Los beneficios comerciales del software como servicio

SaaS no es un concepto nuevo. Las aplicaciones basadas en web proporcionadas por los proveedores de servicios de aplicaciones (ASP) en realidad son anteriores al concepto de “computación en la nube” tal como lo conocemos hoy.

Las primeras aplicaciones entregadas a través de un modelo SaaS generalmente se enfocaban en la automatización de la fuerza de ventas (SFA), la gestión de relaciones con el cliente (llamado CRM) y la gestión de contenido web.

En la actualidad, ofrecen suites empresariales completas para la planificación de recursos empresariales (ERP), la gestión de la cartera de proyectos (PPM), la planificación y la elaboración de presupuestos, la elaboración de informes financieros, la gestión del capital humano (HCM), las ventas y el marketing digital, las aplicaciones de soporte y servicio al cliente, redes sociales, mercadeo social, monitoreo y participación social.